La Fundación Centro de Estudios Andaluces (Centra), junto a la Fundación Blas Infante, y en colaboración con el Ayuntamiento de Isla Cristina (Huelva), ha presentado en la localidad el sexto libro de la colección Biblioteca Blas Infante, Don Dimas. Historia de zorros y de hombres, un título que, por vez primera, rescata un texto inédito de Blas Infante, el primero que ve la luz en las últimas décadas en una edición crítica y comentada.

Según ha indicado la Junta en una nota, el historiador Manuel Ruiz Romero y el sociólogo Norberto Ruiz Rodríguez son los autores de la transcripción del texto y del estudio introductorio que le precede, en el que, además de detenerse en aspectos fundamentales del pensamiento ecológico, social, personal y cultural de Infante, contribuyen de manera definitiva a iluminar la que quizá es una de las etapas vitales menos conocidas del Padre de la Patria Andaluza: sus años en Isla Cristina.

La edición se completa con sendos prólogos firmados por el director de la Fundación Centra, Tristán Pertíñez Blasco, y por el profesor de la Universidad de Málaga y patrono de la Fundación Blas Infante, Manuel Hijano del Río.

El director de la Fundación Centra ha señalado que «la presentación de esta publicación no podría haber sido en otro lugar que en Isla Cristina, pues es aquí donde Infante lo alumbró». Escrito entre mayo y septiembre de 1927, cuando el pensador andaluz estaba ya asentado en su nuevo destino como notario en Isla Cristina, el relato narra la historia de un zorro acogido en su domicilio familiar y liberado más tarde para reincorporarlo a su entorno natural.

Se trata de un texto breve, de poco más de 40 páginas, y preciosista, no exento de tintes autobiográficos, en el que asoma un Infante introspectivo y filosófico, preocupado tanto por la realidad natural como por la situación socioeconómica de la Andalucía que le tocó vivir.

«Estamos ante uno de los textos más hermosos y personales de los escritos por Blas Infante», ha subrayado el director de la Fundación Centra. Su biógrafo, el estudioso Enrique Iniesta, gran conocedor de los manuscritos infantianos, calificó este relato como «el texto más bello e íntimo» de Blas Infante; un relato en el que Infante demostró «su ternura y su sensibilidad franciscana y ecológica».

Su amor por los animales

Infante escribe un relato literario, protagonizado por un zorro con sentimientos humanos, «mostrando su sensibilidad animalista», en el que aboga por el respeto entre especies. Fue pionero al reivindicar, ya en esos primeros años veinte, la defensa del medio ambiente y los derechos de los animales. En Don Dimas sintetiza, de su propio puño y letra, «un acto de paz y amistad entre el animal que tiene su mundo en la ciudad y los animales que tienen su mundo en el bosque». Él lo consideró uno de sus escritos más queridos.

No se trata, sin embargo, del primer texto en el que Infante mostró su decidida defensa de la causa animalista. Así lo manifestó en su conocida Plegaria del pájaro, en sus Mandamientos de Dios en favor de los animales o su recientemente descubierta en Isla Cristina Plegaria del perro.

«La historia de don Blas y don Dimas es la de dos amigos increíbles. Construyeron una pareja insospechada. La ternura que les ata y la desvergüenza con la que don Blas descubre aquí sus sentimientos ennoblecen el texto de veras excepcional», apostilló Iniesta en su obra Blas Infante. Toda su verdad. En Don Dimas, historia de zorros y hombres, «está, sin lugar a dudas, el Infante más espiritual y el más afectuoso», han dicho los investigadores Norberto Ruiz Rodríguez y Manuel Ruiz Romero.

El propio arranque del cuento reproduce, «de manera fidedigna», cómo llegó el zorro a formar parte de la familia Infante en Isla Cristina: «Este es un zorro que cazaron cuando era de pocos días. Lo llevaron a un poblado con sus hermanos, y con su madre ensangrentada. A poco, me ofrecieron uno de ellos, quien puesta bajo su hocico una taza de leche tibia, hundiolo en la blanca superficie batiéndola con la lengua, con sorprendente voracidad. Este es don Dimas a quien bauticé así, en recuerdo del buen ladrón, quien traje sobre las rodillas, metido en una pequeña caja de cartón, hendida por varios agujeros».

Existe una conocida imagen de un joven Blas Infante, vestido con traje claro y corbata, mirando a cámara mientras sujeta con ambas manos al pequeño zorro, que apoya una de sus patas sobre su brazo, manso y tranquilo, en apariencia, habituado a ser uno más en la familia.

El manuscrito ya estaba digitalizado y accesible desde la web del Centro Documental de la Autonomía de Andalucía, de la Fundación Centra. Sin embargo, su lectura en línea resultaba compleja al tratarse de una obra manuscrita en dos pequeños cuadernos con una grafía intrincada, en varias tintas, a pluma y a lápiz, y acompañada de tachaduras, anotaciones y frases incompletas, que han sido transcritas por Manuel Ruiz Romero y Norberto Ruiz Rodríguez.

Junto a ambos investigadores, la presentación ha contado con la participación del director del Centro de Estudios Andaluces, Tristán Pertíñez Blasco; del vicepresidente de la Fundación Blas Infante, Javier Delmás Infante; y del profesor Manuel Hijano del Río. El Ayuntamiento isleño ha estado representado por su alcalde, Jenaro Orta, y por varios miembros de la corporación municipal, entre ellos, la delegada de Turismo, Servicios Generales y Participación Ciudadana, Isabel López Díaz, y la jefa del Servicio de Patrimonio, Archivo y Biblioteca y Soledad Calahuche.

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