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El Parlamento de Andalucía ha aprobado en sesión plenaria el Presupuesto de la Junta de Andalucía para 2023, que asciende a 45.603,8 millones de euros y que entrará en vigor el próximo 1 de enero.
La mayoría absoluta del PP de Juanma Moreno ha servido para sacar adelante una Ley de Presupuestos que ha tenido la oposición manifiesta del resto de los grupos. Tanto es así que, a excepción del propio PP, todos han votado en contra. También Vox, a pesar de que en noviembre desde el gobierno andaluz manifestaran optimismo respecto al apoyo de los de Abascal, cuya presidenta en Andalucía es, desde la salida de Olona, Blanca Armario.
Las enmiendas
La mayor parte de las 99 enmiendas incorporadas a los Presupuestos de Moreno -propuestas tanto por el PP, como el PSOE, Vox, y el Grupo Mixto-Adelante Andalucía- se han sumado tras la ponencia y el dictamen de la Comisión de Hacienda, 90 en total, mientras que las 9 restantes se han añadido durante el debate final en el pleno. La Junta, sin embargo, ha tumbado las 1326 enmiendas de todos los grupos de la oposición -que movilizaban más de 12.000 millones de euros-, a excepción de seis de Vox y tres de Adelante Andalucía: las del grupo mixto de Teresa Rodríguez mueven 50.000 euros del Presupuesto.
El «lío» in voce
Su aprobación, con el voto en solitario del PP, no ha estado exenta de polémicas, siendo la más representativa del proceso aquella protagonizada por el presidente de la cámara autonómica, Jesús Aguirre, que tuvo lugar durante la votación del jueves en el Parlamento. Su origen, una serie de enmiendas in voce y transaccionales -basadas en las enmiendas presentadas a destiempo de otros grupos- que el propio grupo Popular quiso incluir durante el transcurso del pleno, unas enmiendas de las que tanto Aguirre como el resto de miembros de la Mesa no habían tenido conocimiento previo. De hecho, fueron rechazadas, con la negativa de Inma Nieto, de Por Andalucía.
Este hecho recibió las críticas de los líderes o portavoces del resto de partidos con representación, ya que, según afirmó Ángeles Férriz, portavoz del PSOE-A, el PP de Moreno no había «negociado nada». Ahora, una vez que se aprobaron, las críticas se dirigieron a las propias cuentas propuestas por Carolina España, consejera de Hacienda.
PSOE-A: «Presupuestos de la soberbia»
Desde el PSOE-A, en boca de su portavoz, Enrique Gaviño, criticaron el hecho de que se tumbasen desde la Junta presidida por Moreno la mayoría de enmiendas presentadas a los Presupuestos por los grupos: «Estos presupuestos son los de la mayoría absoluta, de la soberbia absoluta». Añadió además que estos presupuestos «del rodillo Moreno» no incluyen planes para mejorar la situación de la industria andaluza o de la energías renovables.
Por Andalucía: El PP «bloquea el incremento de ingresos»
Inma Nieto lamenta que el gobierno andaluz del PP no «acepte nuestras enmiendas a los presupuestos para Andalucía porque supondría un incremento de los ingresos». Y que lo hace porque lo considera «correcto», como «mantener la subasta de medicamentos aún cuando eso obliga a comprar los medicamentos más caros», o «una excesiva derivación a la sanidad privada aun cuando esto supone un sobrecoste o una merma de la calidad de la prestación sanitaria en el servicio público».
Vox: Andalucía «perdió una oportunidad»
Manuel Gavira, portavoz de Vox en el Parlamento, aseguró que «lo que ayer pasó es que Andalucía sigue sin respuestas a sus problemas y se perdió una nueva oportunidad de dárselas». Afirmó que era previsible lo que ocurriría, que habría «muchos aplausos y abrazos del PP al Gobierno del PP, felicitándose por aprobar los Presupuestos y por lo buenos que son», pero que harán «lo mismo que hacía el PSOE-A», es decir, «envolverse en la bandera andaluza» y «desilusionar a la gente».
Adelante Andalucía: «Bonilla vende a plazos la sanidad pública»
Para Maribel Mora, portavoz del grupo Adelante Andalucía, «El gobierno de Moreno Bonilla vende a plazos la sanidad pública a empresas privadas que ganan cientos de millones de beneficios, mientras recorta a los sanitarios públicos». Denuncian que con el gobierno de Bonilla, «no hay dinero para las plantillas en atención primaria», pero sí para «empresas a las que se les va a conceder cuarenta y seis millones de beneficios de nuestro erario público».
Juanma Moreno: Andalucía «está en la senda de la credibilidad»
El presidente del gobierno de la Junta de Andalucía, sin embargo, ha defendido las cuentas presentadas por su consejera de Hacienda manifestando su convencimiento de que tener aprobados unos presupuestos como estos en Andalucía significa «tener estabilidad institucional, política y económica». Algo que, además, sería «muy positivo para atraer inversiones». Afirma que son los presupuestos más altos de la historia de Andalucía, y que más del 60% se dedican a materias sociales». Por tanto, asegura que el territorio «está en la senda» de la «estabilidad», y de la «credibilidad» para «crecer económicamente».