Imagen de Moreno Bonilla / EA
Imagen de Moreno Bonilla / EA

Moreno Bonilla ha invitado a las empresas catalanas a instalarse en Andalucía. Uno de los motivos por los que Juanma Moreno ha firmado este miércoles el decreto por el que se eliminará el Impuesto de Patrimonio es porque «estamos convencidos de que esta medida fiscal atraerá a más contribuyentes a Andalucía». Se esté de acuerdo o no con este axioma, los deseos del presidente andaluz no han gustado nada al catalán.

Aragonés, presidente de la Generalitat, ha acusado esta semana a Moreno de intentar generar un conflicto y una guerra entre territorios al hilo del llamamiento expreso a empresas catalanas. En esta línea, Aragonés ha recordado que gracias a la recaudación que se hace en Cataluña las contrataciones de refuerzo covid se han podido mantener, «mientras que en Andalucía han desaparecido», recogen varias agencias de noticias.

Dumping fiscal, Moreno y empresas

El mandatario catalán ha vuelto a recordar que el tejido empresarial de su Comunidad es fuerte y diverso y «ningún dumping fiscal podrá con eso». Por su parte, el Gobierno Central tiene un dilema. Por un lado, Escrivá, ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha afirmado en declaraciones a la prensa que una solución para evitar enfrentamientos territoriales podría pasar por «recentralizar impuestos». Algo que ha negado inmediatamente María Jesús Montero, ministra de Hacienda y Función Pública, al recalcar que lo que quizás se necesita es una «armonización fiscal» para evitar diferencias entre Comunidades Autónomas.

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