Cádiz ha vivido este 25 de junio una nueva jornada de movilización en defensa de los derechos laborales del sector del metal. En un ambiente pacífico y sin incidentes, miles de personas han marchado por la capital gaditana para exigir un convenio «digno» para la industria auxiliar del metal, clave en la economía de la provincia. La manifestación, que partió a las 10:00 horas desde San Severiano, recorrió barrios obreros como Cerro del Moro hasta llegar a la sede de la Federación de Empresarios del Metal de Cádiz (Femca), para regresar posteriormente por la avenida principal, provocando incidencias habituales de tráfico.
La convocatoria ha sido secundada por más de 5.000 personas, según los sindicatos organizadores CGT y CTM, aunque la Subdelegación del Gobierno ha cifrado la asistencia en torno a 800 manifestantes.
Rechazo al preacuerdo de UGT
Antes de iniciar la marcha, representantes de ambos sindicatos han expresado su rechazo al preacuerdo alcanzado el pasado domingo entre UGT —mayoría en el comité de huelga— y la patronal. Juan Antonio Guerrero, secretario general de CGT, calificó la movilización como «un éxito» de sus organizaciones y de la clase trabajadora, y criticó duramente los términos del posible convenio: «Es una barbaridad que se plantee una vigencia hasta 2032. Con eso se engaña a los trabajadores», denunció.
Aunque CGT no forma parte de la mesa negociadora oficial, Guerrero ha afirmado que trasladarán a la misma las propuestas recogidas entre los propios trabajadores en la reunión prevista para esta tarde en el Consejo Andaluz de Relaciones Laborales (CARL), en Sevilla.
«No queremos cárceles, queremos trabajo digno»
Por su parte, Manuel Balber, portavoz de la Coordinadora de Trabajadores del Metal (CTM), ha advertido que el preacuerdo supone «un retroceso» y ha defendido que su organización apuesta por «un convenio de avance para la clase social y trabajadora de la Bahía de Cádiz». Balber también ha instado a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, como responsable de Navantia, a garantizar el cumplimiento de los convenios.
«Navantia son cárceles, Dragados son cárceles, y lo que queremos es que los trabajadores tengan vida, que puedan disfrutar de sus familias y su tiempo de descanso. No queremos cárceles. Queremos un trabajo digno, un salario digno, y punto», sentenció.
Tercer día de huelga y doce detenidos
La manifestación de este miércoles se enmarca en la tercera jornada de huelga indefinida en el sector de la industria auxiliar del metal. Hasta el momento, el conflicto laboral se ha saldado con doce detenciones, tres de ellas en la primera jornada del lunes y el resto en incidentes ocurridos durante los paros de la semana anterior.