El Servicio Andaluz de Salud (SAS) de Juanma Moreno tardó medio año en comunicar a una vecina de Jaén que debía someterse a una segunda cita para revisión tras detectarle un bulto en el pecho. Cuando finalmente recibió el aviso, la paciente ya había sido diagnosticada de cáncer de mama por la sanidad privada. Su caso forma parte de la plataforma de más de 80 mujeres afectadas creada por FACUA por la presunta negligencia del SAS en la gestión de las mamografías.

Manuela —nombre ficticio para preservar su intimidad— se realizó una mamografía en octubre de 2023 dentro del Programa de Detección Precoz del Cáncer de Mama de la Junta de Andalucía. Por entonces notaba un pequeño bulto, «pero como en otras pruebas anteriores me habían dicho que tenía un quiste y no era preocupante», recuerda, «no le di mucha importancia». Confiada, esperó los resultados.

Sin embargo, el bulto crecía y la comunicación del SAS no llegaba. Ante la incertidumbre, decidió recurrir a su seguro privado, ya que era mutualista de DKV. En una primera cita, en diciembre de ese año, le aseguraron que «si no te ha llamado la SS todo está bien, no te preocupes». Pero en enero de 2024, tras una nueva mamografía, llegó el diagnóstico: cáncer de mama.

Manuela comenzó de inmediato el tratamiento oncológico por la vía privada. No fue hasta marzo de 2024 —casi seis meses después de la primera revisión— cuando recibió la citación del SAS, una vez ya estaba diagnosticada y en tratamiento.

La paciente, hoy libre de cáncer, interpuso una reclamación ante el Servicio Andaluz de Salud por los perjuicios sufridos. Según relata, la demora en la comunicación propició que el tumor creciera y alcanzara los ganglios, dejándole secuelas. «Yo estoy segura de que me avisan a tiempo, a los diez días de la mamografía, que ya tenían el diagnóstico los radiólogos como dicen en la primera carta —en respuesta a mi reclamación—, desde luego el bulto no hubiera crecido», afirma.

En una segunda respuesta remitida por el SAS, el organismo justificó la demora señalando que «dada la alta demanda y los recursos limitados de los que disponemos la citación se realiza atendiendo a criterios de prioridad clínica».

FACUA Andalucía ha exigido a la Junta que depure responsabilidades por lo que considera un «fallo grave en la gestión sanitaria» y ha anunciado que prepara nuevas acciones legales en nombre de las afectadas.