La Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía ha activado la vigilancia y el control de los mosquitos del género culex, vectores del virus del Nilo occidental (VNO), basado en el trampeo y en la búsqueda de virus por PCR, un mes antes que el año pasado, cuando se inició en junio. Este año, además, se han ampliado el número de trampas instaladas por la Consejería, pasando de 27 a 120, y se han instalado en todas las provincias.
Esta vigilancia permite, coordinadamente con las trampas de la Estación Biológica de Doñana-CSIC y las que instalan algunas diputaciones provinciales, tener un sistema más completo con datos semanales, tanto para los aumentos de las densidades de mosquitos, como la presencia del VNO en ellos. La detección de circulación del virus en mosquitos a menos de 1,5 kilómetros de una población supondrá la declaración de esta área en alerta. Este año, todos los municipios andaluces están catalogados en un nivel de riesgo, establecidos al inicio de la temporada, sea bajo, medio o alto.
La confirmación de la presencia del virus en una población, sea en mosquitos, caballos o en un caso en humano, conllevará la declaración del área en alerta, una situación temporal de la que el municipio saldrá cuando, durante cuatro semanas consecutivas no se detecte nueva circulación del VNO en mosquitos o nuevos casos en humanos.
Protección y colaboración ciudadana
Los ciudadanos, sobre todo aquellos que viven en zonas de alto riesgo tienen un «papel fundamental», en tanto que pueden contribuir a evitar que el mosquito ponga sus larvas en nuestro entorno, así como tomar medidas para protegerse de las picaduras o reconocer los síntomas del virus para consultar a su médico de cabecera.
De este modo, la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica incide en la necesidad de usar repelentes de mosquitos registrados y de uso tópico, cubrir la mayor parte del cuerpo con ropa clara, evitar los olores intensos porque atraen a los mosquitos y procurar no salir al amanecer y al atardecer, que son los momentos de máxima actividad de mosquitos. Asimismo, Salud recuerda la necesidad de reforzar las medidas domésticas: instalar mosquiteras, usar insecticidas domésticos/repelentes ambientales o apagar las luces si no son necesarias.
Otra medida fundamental es evitar generar zonas de agua estancada, donde los mosquitos crían sus larvas, por lo que se recomienda mantener adecuadamente las albercas, piscinas y lavaderos y vaciar el agua que pueda acumularse y pasar desapercibida en jardines, macetas, juguetes o cubos. En el caso de explotaciones ganaderas, se aconseja, igualmente, renovar con frecuencia los bebederos de los animales; evitar el agua de charcos en rodadas de vehículos o caminos, fugas de agua por grifos o conducciones rotas, abrevaderos con fugas o con poca renovación.