El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha reclamado este miércoles a los grupos de izquierda en el Parlamento andaluz —PSOE-A y Por Andalucía— que «pidan perdón y reconozcan que han faltado a la verdad» después de que la Fiscalía Provincial de Sevilla haya archivado, en poco más de un mes, la denuncia presentada por la asociación Amama por un supuesto «borrado y manipulación» de mamografías en el programa de cribado del cáncer de mama.
Durante la sesión de control al Gobierno, Moreno ha acusado a ambas formaciones de haber «instalado la mentira» en el debate público y ha sostenido que la denuncia, trasladada al Pleno por la portavoz de Por Andalucía, Inma Nieto, sirvió para «calumniar y sembrar dudas sobre el trabajo de miles de profesionales sanitarios». Según el presidente, Nieto llegó a insinuar en un Pleno anterior que los tribunales determinarían la responsabilidad del Gobierno andaluz, pero ahora, sostiene, «la Fiscalía ha archivado en poco más de un mes la denuncia que plantearon» y la oposición «se ha quedado sin argumentos».
Moreno ha instado a Nieto a «pedir perdón a los profesionales» del sistema sanitario, afirmando que el Ministerio Público concluye que «los historiales médicos de las pacientes examinadas se mantienen íntegros y coincidentes». A juicio del presidente andaluz, el discurso de la portavoz de Por Andalucía es «indigno» y forma parte del «magma de mentiras que ha construido el PSOE de Sánchez y Montero».
El PSOE-A señala que aún quedan 100 denuncias en la Fiscalía
El intercambio subió de tono en el cara a cara entre Moreno y la portavoz socialista, María Márquez, quien exigió al presidente que «pida perdón a las mujeres andaluzas con cáncer y a Amama», recordándole que «todavía hay 100 denuncias en la Fiscalía». Márquez reprochó a Moreno su «exceso de triunfalismo» tras el archivo de una sola denuncia y le recomendó «no estar tan subidito».
Moreno replicó que no hablaría «de denuncias, sino de condenas», refiriéndose a varias indemnizaciones fijadas por los tribunales al Servicio Andaluz de Salud (SAS) en casos de retrasos en diagnósticos de cáncer de mama. Aseguró que el PSOE-A «se ha vuelto a equivocar por utilizar la mentira y manipular», y que las acusaciones formuladas «han hecho daño al sistema público de salud, a los profesionales» e incluso «a los intereses» de la propia formación socialista.
«Sigan por ahí que tienen un gran futuro por delante», ironizó Moreno para cerrar su intervención.
El PP-A acusa a la oposición de promover un «montaje político»
En esta misma línea, el portavoz parlamentario del PP-A, Toni Martín, arremetió contra la oposición tras el archivo de la denuncia de Amama. Martín aseguró que «ni hubo borrado de mamografías, ni manipulación de historiales, ni nada de nada», y calificó las acusaciones como «una inmensa mentira del sanchismo» apoyada, según él, por «lacayos políticos y mediáticos» con el objetivo de «derribar al Gobierno de Juanma Moreno».
El portavoz popular llegó a plantear si sería necesaria una comisión de investigación o un debate general para «depurar responsabilidades sobre los bulos inventados en este enorme montaje político». A su juicio, «aquí el único borrado que ha habido es el borrado que ustedes han intentado hacer de la verdad», y concluyó que, si a la oposición «le quedara algo de vergüenza política», ya habría presentado su dimisión porque «no son dignos del escaño que ocupan».
El episodio mantiene viva una de las polémicas sanitarias más relevantes de los últimos meses en Andalucía, con acusaciones cruzadas entre Gobierno y oposición mientras la Fiscalía continúa analizando el resto de denuncias presentadas.

