El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha cargado este lunes contra el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno (PP-A), al que ha reprochado que «sólo se ha acordado de la sanidad para darle 1500 millones de euros a compañías privadas».
Durante su intervención en la reunión interparlamentaria del Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados, Sánchez subrayó que Andalucía ha recibido de su Ejecutivo «unos 54.000 millones de euros adicionales», lo que supone «un 47% más» de lo transferido por el anterior Gobierno de Mariano Rajoy.
«¿Y qué han hecho el Partido Popular y el señor Moreno Bonilla con esa financiación extra? Pues ha dedicado uno de cada cuatro euros a cosas que no tienen nada que ver con los servicios públicos», señaló el jefe del Ejecutivo, quien acusó al presidente andaluz de haber cerrado más de 2.000 aulas públicas y renunciar a 120 millones de euros europeos destinados a la creación de 12.000 plazas de educación infantil gratuitas.
Críticas al modelo de gestión del PP
Sánchez enmarcó estas críticas dentro de lo que considera una estrategia común en las comunidades gobernadas por el Partido Popular. Según el presidente del Gobierno, el PP está «desviando el dinero público de la administración general del Estado, esos 300.000 millones de euros más de financiación autonómica que les estamos dando, para transferirlo cada año y beneficiar a unos pocos privilegiados».
En este sentido, apuntó que esos fondos terminan «en los mismos que financian sus campañas, sus plataformas propagandísticas o que contratan a sus familiares con salarios estratosféricos».
Rechazo a la quita de deuda
El presidente también calificó de «increíble» que los presidentes autonómicos del PP «se permitan el lujo de rechazar una quita de casi 60.000 millones de euros que ellos mismos pedían y que les permitiría ahorrar 6.700 millones de euros al año en intereses». Una cantidad, subrayó, que «supera en 1.000 millones lo que dedican todas las comunidades del PP a financiar sus universidades públicas».
Defensa del estado del bienestar
Sánchez concluyó su intervención pidiendo a los suyos «denunciar estos hechos y combatir este ataque sin precedentes al estado del bienestar» que, a su juicio, se está produciendo en los territorios gobernados por el Partido Popular, ya sea «con la participación activa o no de la ultraderecha».